Además del cuerpo físico,
tenemos otros cuerpos en otros planos de existencia que interpenetran y afectan
al nuestro. El cuerpo energético o aura rodea al cuerpo físico y, aunque es
ligeramente más grande, tiene una correspondencia con él. Las personas
psíquicamente despiertas pueden ver, sentir e incluso escuchar el aura. En
realidad, tiene varias capas, correspondientes al cuerpo físico, el cuerpo
etérico (un doble energético del cuerpo físico), la mente y las
emociones, así como una capa llamada cuerpo causal que trabaja
para traer nuestras visiones y pensamientos a la forma. Las diferentes
capas han recibido diversos nombres.
Las adicciones tanto como las diferentes emociones (ira, envidia, rencor, odio, depresión, malas palabras, avaricia, malos pensamientos, etc.), dañan estos cuerpos sutiles. Las personas psíquicamente despiertas a menudo perciben agujeros o fugas en el contorno del cuerpo energético de la persona causado por el abuso de las herramientas de poder que ha roto las sensitivas membranas protectoras de energía que están alrededor del cuerpo humano como un huevo o capullo de luz-energía.
Las fugas pueden ocasionar que misteriosamente
se drene la energía o una hipersensibilidad a la influencia de otras personas.
Los adictos y aquellos íntimamente conectados con ellos frecuentemente tienen
problemas con los límites y los agujeros en el aura son parte de este problema.
Las áreas dañadas también pueden ser vistas quizá como puntos oscuros
en el aura, o interrupción en el capullo, o percibidas como un calor o un
frío anormal cuando se está cerca de la persona.
Cambiar para sanar
Si intentas recuperarte, debes
cambiar tu forma de pensar, sentir y obrar, pues estos cuerpos deben ser
reparados junto con el cuerpo físico o no podrás recuperar el equilibrio.
Incluso puedes sentirte sutilmente atraído de vuelta a la adicción como forma
de lidiar con los bloqueos o la energía drenada. El trabajo con los cuerpos
energéticos es parte de la práctica de las terapias de polaridad, y la
sanación con cristales. Aquí también presentaremos algunos ejercicios que te
ayudarán.
EJERCICIO: Limpiando el aura
Sigue los siguientes pasos:
Rodéate con tu burbuja de luz y respira profundamente hasta que sientas un cambio en tu conciencia. Imagina que tienes un gran cepillo cilíndrico, como los que se usan para limpiar los biberones de los bebés. Imagina que está hecho de luz blanca brillante.
Rodéate con tu burbuja de luz y respira profundamente hasta que sientas un cambio en tu conciencia. Imagina que tienes un gran cepillo cilíndrico, como los que se usan para limpiar los biberones de los bebés. Imagina que está hecho de luz blanca brillante.
Divide la parte frontal de tu campo de energía en cuatro secciones. Friega cada sección diligentemente con el cepillo y luego limpia con mucho cuidado también las intersecciones entre las cuatro secciones.
Dale la vuelta a tu burbuja de forma que puedas ver la parte que aún no está limpia detrás de ti. Repite el paso previo. Después friega las partes en las que se unen las mitades frontal y posterior de la burbuja.
Utiliza una luz blanca con una acción tipo jacuzzi para limpiar completamente la burbuja. Ocúpate de drenar la luz blanca hacia abajo por los lados hasta que la luz líquida corra clara y limpia.
Nota qué diferente se siente estar en una burbuja limpia, esto es, en un aura limpia.
Baños
Otra herramienta para
limpiar tu campo energético es tomar un baño de tina disolviendo agua
de mar, o agua con sal marina, o agua mineral o un cuarto del contenido de un
frasco de sales de epsom en el agua de la bañera. También puedes
quemar salvia y hacer que alguien te pase el humo alrededor de
tu campo energético. Finalmente, un pedazo de turmalina verde es
excelente para limpiar tu campo energético. Sostenlo en una mano y pásalo
alrededor de la burbuja
EJERCICIO: Limpiando
las energías de otras personas. Cuando estás en público, especialmente en
atmósferas agitadas o en transportes públicos abarrotados, puedes recoger
energía contaminada. Si tu aura está debilitada, también puedes absorber una
gran cantidad de energía de la gente cercana a ti, particularmente cuando están
disgustados a tu alrededor.
Puede ser que necesites hacer el siguiente ejercicio una vez al día, quizá antes de ir a dormir, cuando has estado en lugares públicos o en periodos de intensa interacción con otros.
Sitúate en tu burbuja y báñate con un gran rayo de luz blanca brillante. Sitúa en otra gran burbuja frente a ti a las personas con quienes hayas estado en contacto ese día. (Esto también funciona situando dentro de la burbuja externa a gente importante pero difícil de tu pasado como padres o parejas).
Imagina que tienes un gran imán en tu plexo solar que está atrayendo de regreso a ti toda tu energía que se haya quedado con esas personas. Ahora imagina que en lugar de tomar tu energía esas personas atraen energía de sus propios Seres Esenciales.
Puede ser que necesites hacer el siguiente ejercicio una vez al día, quizá antes de ir a dormir, cuando has estado en lugares públicos o en periodos de intensa interacción con otros.
Sitúate en tu burbuja y báñate con un gran rayo de luz blanca brillante. Sitúa en otra gran burbuja frente a ti a las personas con quienes hayas estado en contacto ese día. (Esto también funciona situando dentro de la burbuja externa a gente importante pero difícil de tu pasado como padres o parejas).
Imagina que tienes un gran imán en tu plexo solar que está atrayendo de regreso a ti toda tu energía que se haya quedado con esas personas. Ahora imagina que en lugar de tomar tu energía esas personas atraen energía de sus propios Seres Esenciales.
Imagina que la otra burbuja
también tiene un gran imán en la parte exterior y que está sacando fuera de ti
toda la energía que tú has absorbido de estas personas. Si la energía se siente
difícil y tu estás renuente a que ellos la reabsorban, imagina que tienen un
jacuzzi dentro de su burbuja que está drenando el agua bajo sus pies.
Ahora mueve su burbuja detrás de ti, donde es aún más poderosa, y donde drenará la energía que has absorbido psíquica e inconscientemente.
Ahora mueve su burbuja detrás de ti, donde es aún más poderosa, y donde drenará la energía que has absorbido psíquica e inconscientemente.
Ahora baja energía fresca e
inspiración de tu Ser Esencial y luego disuelve la burbuja.
EJERCICIO: Remendando tu aura
Mientras llevaste a cabo la
limpieza de tu cuerpo energético con estos dos ejercicios, quizá puedas haber
percibido agujeros o fugas en tu aura. El siguiente ejercicio, realizado tantas
veces como sientas la necesidad, te ayudará a remendar este cuerpo. De hecho,
cada vez que te sientes dentro de tu burbuja de luz estarás fortaleciendo tu
aura.
Una vez más, sitúate en la
burbuja. Encuentra los lugares donde parezca haber daño, agujeros, fugas o
quizá solo lugares donde se sienta delgada. Puede ser que los veas, que sientas
el movimiento de energía o las diferencias en la temperatura.
Primero debes buscar el
nacimiento de un rio de agua cristalina, o sumergirte en el mar 7 veces
entrando de espalda (una entrada por cada chakra o vórtice de energía).
Si no puedes tener ayuda de una persona idónea. Haz lo siguiente: En quietud y recogimiento siente donde haya agujeros grandes, tienes que usar un empaste de luz para taparlos. Una pasta de luz te ayudará a cubrir los pequeños agujeros y las grietas. Haz un trabajo minucioso para enmendarlos.
Ahora imagina que tienes un rodillo de pintura hecho de luz blanca brillante y un cubo con pintura blanca brillante. Cubre el rodillo de pintura de luz blanca, permite que se absorba dentro del rodillo y pásalo dando una gruesa capa alrededor de tu aura. Báñate en luz pura blanca radiante cristalina hasta que te sientas renovado.
Siente la gloria de la
brillantez y la paz de tu recién restaurado cuerpo energético.
EJERCICIO: Un ramo de flores de
chakras
Si has completado la limpieza anterior ahora
puedes enfocarte con seguridad en una flor particular especialmente relevante
para tus propias necesidades personales. Sin embargo, durante un buen periodo
de tiempo, deberás haberte dedicado a cuidar y cultivar todo el jardín en lugar
de una sola flor. Una sola rosa perfecta está bien si tus recursos son
limitados, pero desde nuestra visión, podemos encargarnos de todo el ramo.
Cada uno de los centros puede tener un tipo
distinto de flor y de color, los tuyos pueden ser diferentes que los de otras
personas. Para algunos estos colores siguen el espectro del arco iris,
comenzando con el rojo para el chakra raíz.
Siéntate en tu burbuja. Sintonízate con tus chakras y siente que cada uno de ellos es una flor a punto de florecer. Siente que todas estas flores están mirando hacia el exterior hacia fuera de tu cuerpo.
Lentamente, pétalo por pétalo,
comenzando por tu chakra raíz, siente que cada una de estas flores comienza a
abrirse. Quizá puedas querer poner tus manos sobre cada chakra y repetir una
afirmación, por ejemplo, para el chakra raíz: ESTOY ENRAIZADO EN MI
CUERPO Y EN MI VIDA; para el chakra sexual: ESTOY ABIERTO A MI
SEXUALIDAD Y A MI CREATIVIDAD; para el plexo solar: SOY FUERTE
Y TENGO CLARIDAD, ESTOY A CARGO DE MI VIDA; para el centro
cardiaco: SOY AMADO Y SOY AMOROSO; para el chakra raíz: YO
SOY RIQUEZA ABUNDANCIA PROSPERIDAD EN TODO SENTIDO.
Nota que cuando el centro de la
flor se revela hay una cálida luz allí que brilla hacia fuera, iluminando tu
burbuja y brillando hacia el mundo.
Cuando el proceso parezca estar
completo, mantén las flores contigo y disuelve la burbuja.
Si haces este ejercicio varias veces para cada uno de los chakras, comenzarás a sentir una movilización de las energías en esas áreas. Puede ser que las flores necesiten reabrirse de tiempo en tiempo, ya que se cierran fácilmente con el estrés, la fatiga, las experiencias duras o la repetición de tus adicciones menores. También puedes imaginarte flores abriéndose en cualquier órgano del cuerpo que real o simbólicamente haya sido afectado por la dicción. Por ejemplo, puedes visualizar flores abriéndose en los oídos si sientes la necesidad de querer ser mejor escuchando a los demás, o en los ojos si quieres apreciar con más profundidad el arte.
Si eres del tipo de personas que le es muy
fácil dar a los demás pero tiene dificultades para recibir, imagina que hay
flores cerradas mirando hacia el interior del cuerpo en cada uno de los
chakras. Ábrelos repetidamente con una afirmación como esta: “Estoy
dispuesto a recibir”.
Esto te ayudará a
equilibrar el flujo de energía. Cuando la energía únicamente sale y tú no
recibes nada, al final te sientes vacío y resentido y te ves tentado a abusar
de alguna sustancia para llenar el vacío resultante.
EJERCICIO:
Sellando las grietas de tus chakras
Conforme tus capacidades intuitivas se entrenan y mejoran al hacer este trabajo, puedes llegar a sentir que hay verdaderas rupturas en algunos de tus chakras. Los traumas y las tragedias suelen causar tales rupturas y a veces la adicción se desarrolla como una forma de parar la salida o de llenar el vacío que deja este tipo de daños.
No hay unas pautas específicas para las rupturas de chakras. Si son suficientemente devastadoras, incluso pueden ser heredadas. Un padre con una insuficiencia en algún chakra no tiene la capacidad de nutrir plenamente ese chakra en su hijo. Cuando uno de nuestros clientes en recuperación, una adicta al azúcar, fue a Irlanda, intuitivamente descubrió que la ruptura del chakra raíz causada por la emigración de su tatarabuelo a América cuando su familia fue azotada por la hambruna de la patata, había pasado a todas las generaciones subsiguientes. Este lado de la familia había sido afectado por adicciones al alcohol y al azúcar en cada generación y también era incapaz de echar raíces en ningún lugar, mudándose frecuentemente.
Ella fue el
primer miembro de la familia que fue a Irlanda desde la emigración y le resultó
increíblemente conmovedor. En los muelles de County Cork, donde el tatarabuelo
se embarcó, ella utilizó el ejercicio que sigue para reparar su chakra raíz. Y
también hizo el mismo ejercicio en favor de cada uno de los miembros de la
familia que ella sabía que tenían problemas de este tipo, en todas las
generaciones a partir del tatarabuelo hasta el bebé recién nacido de su sobrina.
Estos son los
pasos:
Identifica el chakra que necesitas reparar usando tu intuición o el ejercicio de evaluación de los chakras.
Entra en un estado profundo de conciencia y llama a tu Ser Esencial para que te ayude a reparar este centro.
Imagina que te estás encogiendo hasta que eres los suficientemente pequeño para caber dentro del chakra.
Ahora entra en el chakra y siéntelo como una pequeña y acogedora habitación que te rodea, como si fuera un huevo. Llénalo de luz del color de tu elección, quizá azul ya que un chakra roto suele estar lleno de miedo.
Explora las paredes del chakra con tu mente y localiza las grietas.
Utiliza luz líquida para pintar las paredes de toda la habitación.
Sal de la habitación y regresa a tu tamaño normal.
Técnicas para
limpiar los chakras
Exceptuando el
chakra cardiaco, usualmente es mejor abrir todos tus chakras juntos, en lugar
de enfocarte en un solo centro, para no crear un desequilibrio. Si abres el
centro corona y el tercer ojo para el trabajo psíquico y espiritual sin limpiar
y abrir los centros de abajo, puedes abrirte a sensaciones y experiencias
desequilibradas. Abrir el chakra sexual sin poner atención en el corazón puede
conducirte a relaciones distorsionadas y carentes de amor. Por eso es mejor
atenderlos a todos por igual.
EJERCICIO: El remolino limpiador de chakras
Visualiza los chakras y localízalos en tu cuerpo según el diagrama presentado anteriormente.
Rodéate de tu burbuja y llénala con luz de algún color en particular, siguiendo tu intuición. Para muchos propósitos, lo mejor es la luz blanca, ya que contiene todos los otros colores.
Comienza con el chakra raíz. Crea un remolino o embudo de luz que apunte hacia el chakra. Deja que este remolino actúe dentro del chakra como un tornado, girando y absorbiendo las áreas oscuras u obstrucciones que te impiden sentirte conectado con la tierra. La luz continuará girando durante el tiempo que sea necesario, incluso mientras te mueves hacia otros chakras.
Sigue hacia el chakra sexual y visualiza otro remolino que nuevamente se activa y consume los obstáculos. Aquí la dificultad que necesita ser sanada traerá como resultado el equilibrio saludable del flujo de la energía sexual.
Cuando estas dos áreas bajas se sientan relativamente limpias, sigue con el plexo solar y comienza allí un nuevo remolino. En esta área, la luz brillante se llevará todas las obstrucciones de una saludable y realista auto estima, disolviendo las viejas heridas del ego y los sentimientos de falta de confianza.
Permite que los torbellinos anteriores continúen girando y muévete al centro cardiaco para empezar uno allí. El centro cardiaco, al ser tan crucial y vulnerable, puede necesitar más tiempo para quedar limpio, ya que paulatinamente irán saliendo las viejas heridas para lidiar con ellas.
Aquí la luz consumirá las obstrucciones para amar y ser amado.
Ahora muévete al chakra del timo. Probablemente éste no se sentirá bloqueado, sino simplemente no abierto. Utiliza aquí el torbellino para ayudarte a despertar este centro. Siéntete conectado con el mundo de una forma pacífica y abrigadora.
Ahora visualiza un torbellino en el centro de la garganta, donde podrá consumir los obstáculos hacia la comunicación y el libre flujo del dinero.
Ahora visualiza el centro del entrecejo donde el tornado te liberará de los obstáculos al flujo de la creatividad y la energía psíquica.
Finalmente utiliza un tornado para limpiar el centro corona de los obstáculos para la meditación y la inspiración, de forma que puedas abrir tu conexión espiritual con todo lo que es.
Observa cuáles de los centros aún tienen tornados girando, ya que éstos pueden requerir un trabajo especial. Haz brillar la luz intensamente en aquellas áreas durante unos momentos antes de detenerlos y disolver la burbuja.
Repite esto
durante unos días, hasta que los chakras parezcan limpios. Más adelante,
repítelo con diferentes colores, conforme te guíe tu intuición. Incluso cuando
hayas terminado, repite el proceso de limpieza periódicamente para impedir que
se formen nuevas obstrucciones en el curso de la vida diaria o a partir de
nuestras adicciones menores.
Siempre que estemos cerca de otras personas no muy
positivas o en lugares cargados de radiación electromagnética podemos estar
exponiéndonos a las energías sutiles que estos se desprenden. Aunque la mayoría
de las veces estas energías son positivas pueden llegar a ser beneficiosas.
Hay ocasiones en
que las energías que emanan las personas, así como los pensamientos negativos y
las emociones pueden ser tóxicos para nosotros, hay que ser conscientes que
las energías negativas de aquellos que nos rodean
pueden llegar a ser perjudiciales para nuestra aura y a su vez puede causarnos
daño a todos nuestros “cuerpos” sutiles
energéticos. Por “cuerpos” se entiende, el
cuerpo emocional, cuerpo mental, cuerpo espiritual y por supuesto finalmente tu
cuerpo físico. Todos y cada uno de ellos están contenidos en nuestra
aura. Afortunadamente, la naturaleza nos ha obsequiado con piedras y
cristales que podemos utilizar para proteger nuestra aura del ataque o efectos
de las energías negativas que nos rodean.
¿Qué es el
aura?
Todo cuanto nos
rodea tiene un aura, ya sea vivo o inanimado. El aura es un campo de energía
creado por átomos y moléculas que componen toda la materia. El propio universo
vibra a una cierta frecuencia creando así una naturaleza electromagnética. El
aura en cada persona es tan única como sus huellas dactilares. Según el estado
del aura puede proteger, atraer, influenciar o incluso hacernos enfermar.
Hay que comenzar
a ser conscientes que este campo de bioelectricidad que nos rodea se puede
programar usando nuestro poder mental. Cuando la meditación se
realiza de forma constante aumenta nuestra sensibilidad y podemos llegar a
percibir las distintas frecuencias vibratorias que nos rodean. El tai
chi o el Yoga también ayudarán a fortalecer y también a equilibrar
nuestras energías.
Nuestra aura
actúa como una pantalla protectora para bloquear y repeler las energías
negativas, los pensamientos y sentimientos de los demás y también para evitar
la posible fuga de nuestra propia energía. Además, los “desgarros” o los “agujeros” en
nuestra aura se pueden formar desde dentro del aura, debilitándola lentamente
por lo que sin darnos cuenta seremos susceptibles de ser invadidos por energías
externas. Estos “agujeros” tienen su origen en
muchas causas, como el estrés, traumas, depresión, abuso y lesiones físicas o
enfermedades, por nombrar sólo algunas.
Energías
negativas
Las energías
negativas de las personas vienen a través de muchas formas como el estrés, por
ejemplo, que puede ser contagioso y se transmite de una persona a otra. La
irritabilidad y la ira son también energías negativas que fácilmente pueden
pasar de una a otra persona y son energías negativas altamente
contagiosas. También existen los llamados vampiros psíquicos. Cuando
nuestra aura no es fuerte podemos sentir como estas personas nos van extrayendo
toda nuestra energía haciendo que nos sintamos agotados. Una maravillosa piedra
para protegernos contra el vampirismo psíquico es la
Labradorita que evita cualquier pérdida energética.
Dos buenas
piedras para protegernos contra los ataques psíquicos son la Turmalina Negra que protege de las energías
negativas y el cuarzo rosa, que transforma los
sentimientos negativos en positivos y para la curación de las emociones es la
más adecuada. Casi todas las piedras oscuras o negras nos ayudan a protegernos
de las influencias y los efectos de las energías negativas. Algunas de éstas
son el cuarzo ahumado, hematita, ónix negro y obsidiana negra.
Las siguientes piedras se pueden utilizar para mantener
nuestra salud áurica y nuestra protección en general:
Ámbar: alinea los cuerpos sutiles con el cuerpo físico, de esta forma nos
libera de cargas negativas tanto las nuestras como de las ajenas.
Amatista: cura “agujeros” en el aura, la
limpia, canaliza la energía divina para proteger el aura.
Lágrimas
de Apache: protege el aura y le impide absorber
las energías negativas de cualquier fuente, pero sobre todo la negatividad de
otras personas.
Jaspe de
sangre: limpia el aura.
Cornalina: repara el aura.
Citrino: limpia y alinea el aura.
Magnetita: fortalece el aura.
Cuarzo: limpia, protege y fortalece el aura.
Cuarzo
ahumado: armoniza la energía y elimina la
energía negativa del aura.
Turmalina
verde: cura aquellas partes del aura que han
sido dañadas por diversas energías emocionales.
Como
reparar y cuidar nuestra aura
Una forma de
sanar el aura es pasando lentamente la piedra o cristal elegido por el aura (el
espacio alrededor de todo el cuerpo). Puedes llegar a sentir frío y vacío o
bien calor, en cada persona la piedra puede sentirse de una forma diferente, a
veces es como si se fuera enfriando o vibrando ligeramente, otras veces se
percibe un calor y un leve cosquilleo.
Si eres
sensitivo y has localizado un “agujero o un desgarro” en
tu aura entonces, mantén la piedra sobre la zona durante varios minutos. Quizás
sientas la necesidad de mover la piedra alrededor de la zona en círculos hacia
la derecha o bien con un movimiento ascendente y descendente. De esta forma la
rotura se “sellará”, es decir quedará
reparada. Después no olvides limpiar la piedra en cuestión. La forma más
fácil de usar las piedras para la protección es llevar la piedra elegida
siempre con nosotros, de esta forma nos aportará la protección de forma
constante.
Piedras de
protección comúnmente utilizadas como amuletos
Ágata: protege contra el peligro, los problemas personales y los espíritus
malignos. Protege durante los viajes.
Ojo de
Ágata: ahuyenta el mal de ojo.
Ámbar: protege el aura y funciona como un protector en general.
Amatista: protege contra las energías negativas, la magia negra, ataques psíquicos
y el desgaste de curación. Protege durante los viajes. Protege a los soldados
de cualquier daño. Protege de los intentos de otros para robar el poder de uno.
Angelita: aumenta la protección angelical.
Lágrimas
de Apache: protege el aura y protege del estrés
ambiental.
Aquamarina: contrarresta la atracción de los espíritus oscuros y atrae a los
seres de luz.
Piedra de
Sangre: protege contra el engaño, los
espíritus dañinos, heridas y picaduras de insectos. Ofrece protección psíquica.
Cornalina: protege de las energías negativas y bajos astrales. Se dice que
bloquea de los intentos telepáticos hacia su portador.
Citrino: te hace menos susceptible a las influencias negativas. Además, ayuda
a la inspiración y la creatividad.
Diamante: se dice que protege contra las plagas y la pestilencia, las
pesadillas de entidades negativas del mal de ojo y de la magia negra.
Esmeralda: protege la salud y da suerte en los juegos de azar. Potencia la
economía.
Epidota: protege contra circunstancias conflictivas.
Fluorita: funciona como un escudo psíquico, potencia las capacidades psíquicas
del portador mientras permite la conexión con los reinos espirituales. Además,
protege de los campos electromagnéticos.
Jade: protege a los niños contra las enfermedades infantiles. Su energía
aporta longevidad a su portador.
Jaspe: protección en general, así mismo protege contra espíritus negativos.
Se dice que protege contra la picadura de animales venenosos.
Labradorita: protege el aura de energías negativas y
contra los ataques psíquicos, el vampirismo psíquico y de las posesiones
espirituales.
Malaquita: protege contra la negatividad de los demás y de los ataques
psíquicos. Protege contra la radiación y envenenamiento.
Marcasita: protege de energías negativas y de entidades de oscuridad.
Piedra
Lunar: protege contra los peligros de los
viajes.
Obsidiana: bloquea las influencias negativas. Protege contra el estrés
ambiental.
Ónix
Negro: protege de los espíritus dañinos y el
estrés ambiental. Bloquea influencias negativas.
Ópalo: protege al portador de aquellos que quieren hacerle daño.
Peridoto: una potente protección contra las fuerzas negativas. Actúa como un
potente escudo de protección contra las fuerzas negativas.
Cuarzo: Es un potente protector y sanador a todos los niveles. Pudiéndose
complementar con otros cristales o piedras.
Cuarzo
Ahumado: protege contra influencias negativas.
Cuarzo con
Turmalina: protege la vida en esta encarnación.
Rubí: protege contra los ataques psíquicos y las desgracias.
Sugilita: protege al alma de los golpes y las desilusiones.
Ojo de
Tigre: protege contra intrusiones
espirituales negativas y además protege a los viajeros de los accidentes de
automóvil.
Topacio
Azul: protege de cualquier daño.
Turmalina
Negra: protege contra las influencias
nocivas físicas y psíquicas, tales como ataques psíquicos, el vampirismo
psíquico, posesión de espíritus y las posibles intrusiones dañinas de espíritus
oscuros. Protege el aura de los hechizos y del mal de ojo.
Turquesa: protege de posesiones y ataques de bajos astrales en los sueños.
Nunca se deben
olvidar las afirmaciones positivas. Repite esta afirmación todos los días para crear un aura fuerte y
limpia visualizando como una columna de luz blanca y resplandeciente desciende
del cosmos hacia tu séptimo chacra (encima de tu cabeza).
“Mi aura
es muy potente y me protege en todo momento”
Recogido: https://compartiendoluzconsol.com/2019/07/26/proteccion-y-reparacion-del-aura/